En un programa de televisión polaco se estaba realizado una presentación de un truco de magia por parte de Marcin Połoniewicz, pero este truco de magia salió terriblemente mal.

El truco consistía en aplastar bolsas de papel, con el riesgo de encontrar la bolsa que tuviera un clavo que se introdujo en una de ellas previamente.

Marcin aplastó la primer bolsa sin problemas, pero cuando le tocó el turno a la presentadora Marzena Rogalska esta tuvo el infortunió de encontrar la bolsa con el clavo.

Al momento del hecho sus compañeros parecían no entender lo que acababa de ocurrir hasta que finalmente notaron el clavo enterrado en la mano.

Mas tarde Marzena informó que se encontraba bien y que ya estaba en recuperación.