Lo que parecía ser un flamante lanzamiento de uno de los teléfonos insignias de Samsung ha resultado en un dolor de cabeza para la compañía.

Recientemente se han dado a conocer situaciones en que la batería del dispositivo explota y se incendia, dejando una desagradable experiencia para el usuario.

Uno de los casos mas recientes es el del incendio de una camioneta, Nathan Lydia Dornacher, cuenta que después de hacer unas compras, regresa a su vehículo para recoger mas cosas solo para encontrar que se estaba incendiando.

El había dejado su Galaxy Note 7 cargando y las evidencias arrojan que se presentó el conocido desperfecto para finalmente incendiar su camioneta.

Esto se suma al requerimiento de la Administración Federal de Aviación (FAA) de que el Galaxy Note 7 no se encienda ni se cargue la batería del dispositivo cuando se esta en el avión, tampoco se permitirá que vaya en el equipaje que se documenta.

Ante todo esto se estima que las perdidas por las devoluciones, cambios y reemplazos de los dispositivo supere los mil millones de dólares, pero para una compañía como Samsung esto no puede ser lo mas problemático, si no la pérdida de la confianza de parte de los usuarios, algo que será difícil de recuperar si se siguen presentando mas problemas similares.